14.9.05

SUPERMAN / BATMAN: PODER ABSOLUTO


Portada de Superman / Batman nº 18, por Carlos Pacheco con tinta de Jesús Merino.

"Absolute Power" ("Poder absoluto") es la saga publicada en Superman / Batman nº 14 a 18. Lo primero que llama la atención de esta historia son los estupendos dibujos de Carlos Pacheco, que al menos para mi gusto son muy superiores a los de los anteriores artistas de la serie. El cambio gráfico es grande y para mejor, y responde a la habitual táctica de Jeph Loeb de dar a sus dibujantes lo que quieren ilustrar. Así, por la colección aparecen como invitados la Legión de Superhéroes, la Legión de Supervillanos, personajes de los cómics del oeste de DC y un largo etcétera de invitados. Tan habitual como la presencia de invitados a gusto del dibujante es la costumbre de Loeb de recurrir a textos de apoyo para explicar qué piensan los protagonistas.

Lo que ya no es tan corriente es que una historia de Loeb, y menos en Superman / Batman, me guste, así que hoy haré un pequeño resumen de lo que cuenta. Y con spoilers.

Superman y Batman, los señores del mundo

La Legión de Supervillanos eran un grupo de malvados del siglo XXX que funcionaban como antítesis adulta de la Legión de Superhéroes. Su primera aparición tuvo lugar en Superman nº 147 (1961, por Jerry Siegel y Curt Swan). Aunque tuvo otros miembros, los principales fueron Cosmic King, Saturn Queen y Lightning Lord, réplicas de Cósmico, Saturno y Relámpago respectivamente. Los tres murieron a patas de Krypto en "Whatever Happened to the Man of Tomorrow", y no habían aparecido hasta ahora en el Universo DC post Crisis.

El trío de villanos llega al siglo XX con la intención de dominar la Tierra. Lightning Lord y Saturn Queen se presentan en Smallville y matan a los Kent justo cuando están recogiendo al pequeño Kal-El de su cápsula espacial. Mientras, Cosmic King acaba con el ladrón que ha matado a los Wayne antes los ojos del pequeño Bruce. Con ambas acciones, la Legión adopta a Bruce y Kal y los cría según su propio criterio.

Han pasado ya los años y Batman y Superman son adultos con pleno uso de sus facultades (y alguna otra nueva, como la magia que Batman ha robado a Zatanna). Ambos sirven ciegamente a sus padres adoptivos y han conquistado el mundo para ellos. El resultado es una Tierra fascista en la que hay poca resistencia metahumana. La Legión se encargó de matar a Hal Jordan y a Barry Allen antes de que se convirtiesen en Green Lantern y Flash; frió el cerebro de J'onn J'onzz en cuanto llegó a la Tierra; Aquaman nunca llegó a nacer porque acabaron con sus padres antes de que lo concibieran. Hay que ver lo que cunde una esfera temporal del s. XXX.

La resistencia

Aunque la Legión acabó con el núcleo de la Liga de la Justicia antes de que sus miembros se convirtieran en superhéroes, aún queda en la Tierra un buen puñado de justicieros que se opone a Superman y Batman; y todos van cayendo ante el dúo, que está convencido de que la Tierra está mejor bajo su yugo. Sus últimas víctimas son Green Arrow (impecable en su papel, por cierto) y Deadman. Sin embargo, hay alguien que va a darles más guerra de la que pueden imaginarse.

De una isla perdida ha llegado Diana, la princesa de las amazonas, que luce un uniforme fantástico. Tiene los elementos clásicos del traje de Wonder Woman con tela negra y estrellitas, como el uniforme de Donna Troy. Vamos, el vestido ideal para Donna si se convirtiera alguna vez en Wonder Woman... Un oráculo le ha dicho que el mundo no es el que debe ser, y está dispuesta a devolver las cosas a su sitio aunque deba pasar por encima de Superman y Batman. Tirado en un metro, encuentra al Tío Sam, al que entrega el anillo de poder de Abin Sur. Los dictadores escondieron la nave... y dejaron dentro el anillo en lugar de cogerlo; es extraño, pero aceptamos pulpo. Juntos, reclutan al resto de los Luchadores de la Libertad, esto es, Phantom Lady, Human Bomb, Doll Man y el Rayo. Así, acuden a la Isla de Ellis, donde se erige una inmensa estatua en homenaje a Kal y Bruce. Allí deben hacer frente a la Legión de Superhéroes venida del s. XXX y a los propios Superman y Batman. El segundo muere a manos de Diana, que a su vez es asesinada por el primero con su propio lazo.

Aunque Diana ha muerto, los Luchadores avanzan hacia su objetivo, que es la esfera temporal de la Legión de Supervillanos. Cuando ven que Superman y Batman van a impedir a toda costa que viajen al pasado para devolver la historia a su sitio, Human Bomb explota al lado del artefacto y la corriente temporal se revoluciona. Todo desaparece para comenzar en algún otro lugar.

Perdidos por el tiempo

El tercer número de “Poder absoluto” nos muestra a Batman y Superman vagando por diversas realidades. La primera de ellas es el mundo futurista y alternativo de Kamandi, un personaje creado por Jack Kirby en los setenta que vive en una Tierra dominada por simios donde la humanidad está casi extinta. De hecho, Kamandi era "el último chico de la Tierra". Cuando Superman y Batman mueren, son transportados a otra realidad en la que Lex Luthor es presidente de Estados Unidos y el país vive en medio del salvaje oeste. Recordemos que los cómics western son una debilidad de Pacheco, y aquí tiene la ocasión de dibujar a personajes como Jonah Hex. De nuevo, mueren los protagonistas.

Su tercera visita es una Tierra dominada por Darkseid y esculpida a imagen y semejanza de Apokolips. Pero el tirano no está solo; lo acompañan Metron, el Diablo y el Superman del futuro que vimos en el número dos de esta colección (Superman / Batman: Enemigos públicos de Norma). Son Metron y este Hombre de Acero quienes informan a la pareja de que, para acabar con el bucle de muerte y renacimiento en que están metidos, deben viajar al pasado, detener a la Legión de Supervillanos y devolver las cosas a su cauce original. Por cierto, cuando apareció ese Superman en el número dos, muchos pensamos que era el de Kingdom Come. Pues no, la cosa es aún más gorda, como veremos más adelante.

Así, el dúo aparece en Smallville con un tubo boom. Saturn Queen los ve y, temerosa de lo que pueda pasar, huye con sus compañeros de la Legión antes de matar a los Kent. Claro que, cuando Batman tiene enfrente la escena de la muerte de sus padres, no puede evitar impedir el asesinato. Con esto, la realidad vuelve a distorsionarse.

El nuevo rey del mundo

Se supone que, si Batman ha impedido el asesinato de los Wayne, Bruce nunca se puede haber convertido en tal. Así, Superman aparece solo en un mundo donde todo parece patas arriba. La ciudad que amalgama Nueva York, Gotham y Metrópolis está tomada por el ejército del nuevo gobernante de toda la Tierra, que no es otro que Ra's Al Ghul. Superman encuentra a Bruce en su mansión y le hace ver quién es. Ambos se marchan al Himalaya en busca de Ra's no sin antes hacer algo bastante macabro: desenterrar los cadáveres de la Liga de la Justicia para meterlos en el Pozo de Lázaro.

Se monta así una buena trifulca entre la Liga y los secuaces de Ra's, que son, sorpresa, la Legión de Supervillanos. El desenlace está claro ¿no? Superman y Batman devuelven a los villanos al siglo XXX y regresan a su tiempo normal que ha permanecido inalterado. O no.

Y es que, amiguitos, que final tiene esta historia. Por una parte, tenemos una splash page (un poco pocha, por cierto) mientras Superman y Batman vuelven atrás en el tiempo hacia su época real. En esa página hay varias secuencias de diferentes épocas y ¿qué vemos ahí? Pues a Superman cogiendo en brazos el cadáver de Supergirl como en la desgarradora escena de Crisis en tierras infinitas nº 7. Cuando lo detectas, dices, mira qué guiño más apañado a algo que se supone que no ha pasado nunca. Sin embargo, al final del quinto episodio, descubrimos que el Superman que estaba con Metron y que salió en el número dos no es el de Kingdom Come, no. Es el Superman pre Crisis, y en la última página vemos una recreación del final de "Whatever Happened to the Man of Tomorrow". ¿Significará esto algo?
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