20.7.06

52, SEMANAS 5 A 8

52 Weeks 5 through 8
Guión de Mark Waid, Greg Rucka, Grant Morrison y Geoff Johns.
Bocetos de Keith Giffen.
Dibujo de Chris Batista (Week 5), Joe Bennett (Week 6), Ken Lashley (Week 7) y Eddie Barrows (Week 8).
Complementos por Dan Jurgens (guión y dibujo).
DC Comics, 32 páginas, 2,50$ c/u.

Durante su segundo mes de puntual andadura, 52 ha continuado manteniendo el interés; bueno, el mío por lo menos. Las historias que nos cuenta avanzan a un ritmo correcto. Como decía el mes pasado, no hay prisa porque el equipo creativo tiene un año para contarnos esta historia. Eso sí, cada número tiene un detalle, sorpresa o momento que mantiene el misterio y nos invita a volver.

Lo más destacable de estos cuatro números serían, en mi opinión, oros tantos aspectos. El primero sería la evolución del Hombre Elástico, que empezó de forma muy trágica la serie y se va convirtiendo en el detective que era poco a poco. Eso sí, ha perdido el humor, cosa que tampoco es de extrañar, y ya veremos cuánto tarda en desmoronarse ante la que se le puede venir encima. La trama del culto kryptoniano puede venirle muy grande, y más si las cosas siguen en el camino que apuntan en el número ocho. En segundo lugar, me resulta muy atractiva la relación entre Steel y su sobrina Natasha, que podría tener consecuencias muy, pero que muy peligrosas para ambos.

En tercer lugar, tendríamos la situación política del Universo DC. En un terreno no muy explorado en los cómics de superhéroes, es interesante seguir el recorrido de una alianza internacional comandada por Kahndaq y Black Adam y apoyada por China y, seguramente en muy poco tiempo, por Rusia. La situación pone en apuros a los Green Lantern de la Tierra, y parte de ello se debe a ciertos recién llegados. Y es que, como tercer punto de interés, tenemos los personajes nuevos que se han creado para esta serie. Los Diez Grandes, el ejército de superhéroes chinos, promete dar mucho juego en la serie y en "Un año después" (léase Checkmate). Otro personaje creado en 52, o más bien recreado, es Kathy Kane. Convertida en una rica heredera propietaria del medio Gotham que no es de Bruce Wayne, esta Batwoman puede salir muy bien más allá de las inclinaciones sexuales de las que tanto se ha hablado.

El dibujo, vistos otros artistas que no sean Joe Bennett, demuestra que tener a Keith Giffen al frente de los bocetos da a 52 la consistencia necesaria. No es que los dibujantes tengan estilos radicalmente distintos entre sí, pero Giffen consigue que los cambios sean menos bruscos. Y es que, frente a los muy inspirados Bennett y Barrows, tenemos a un Ken Lashley algo soso y a un Chris Batista que parece encontrarse muy cómodo.

Una historia interesante, buenos momentos de caracterización, intriga política, dibujo consistente a pesar de la legión de artistas que se ocupan de él. ¿No tiene nada malo esto de 52?. Pues sí, tres cosas. Una es la subtrama con Starfire, Animal Man y Adam Strange, que me parece cogida con pinzas y se me antoja innecesaria a falta de ver hacia dónde nos lleva. Otra sería que no se huele a los tres grandes ni a lo que están haciendo durante este año sabático. Vale, sale Clark Kent pero muy de refilón. Esto me hace pensar en posibles miniseries o especiales dedicados a ellos...

Por último, está la "Historia del Universo DC" de Jurgens, que ya puedo afirmar que no me gusta. Es demasiado genérica y se centra mucho en los acontecimientos ocurridos desde finales de los noventa hasta ahora. Es cierto que eso sirve para poner en antecedentes directos a los recién llegados, pero los cambios producidos en el Universo DC en épocas anteriores a la Crisis original son muchos, y no se abordan lo suficiente. Menos mal que a Donna Troy le espera un futuro mejor que el de hablar con una grabadora con forma de balón.
52, BOOSTER GOLD, AND ALL RELATED INDICIA ARE (C) DC COMICS.