LAS VIDAS DE JEAN GREY

Ilustración de Greg Land para la portada de Phoenix: Endsong nº 1

Jean Grey pertenece a aquella primera generación de superheroínas de Marvel Comics que se caracterizaban por ser meros floreros al lado de sus compañeros masculinos. Eran mucho más débiles que éstos, y con frecuencia necesitaban ser rescatadas. Eran otros tiempos y, con el paso de las décadas, tanto Jean como sus colegas (Sue Richards, la Avispa y la malograda Bruja Escarlata) han evolucionado y pasado por diferentes etapas; ahora son más decididas y mucho más poderosas. Aunque actualmente está oficialmente fallecida, Jean ha tenido mucho peso en el Universo Marvel en general y en el cosmos mutante en particular.

La Chica Maravillosa

La primera aparición de Jean Grey fue en X-Men nº 1 (septiembre de 1963); se trataba también del debú de la Patrulla-X original, creada por Stan Lee y Jack Kirby. En aquella primera historia, el equipo ya estaba formado y habría que esperar para conocer el origen de Jean, que por aquel entonces llevaba el lamentable alias de Chica Maravillosa (Marvel Girl).

Elaine y John Grey habían vivido tranquilamente en Annadale on Hudson (Nueva York) con sus hijas Jean y Sarah hasta que la primera cumplió los diez años. Mientras jugaba con su amiga Annie, a ésta la atropelló un coche y Jean la sintió morir en su cabeza. Fue la primera manifestación de unos poderes telepáticos que preocupaban a sus padres. Recurrieron éstos a Charles Xavier y su Escuela para Jóvenes Talentos. El telépata bloqueó los poderes de Jean hasta que fuera un poco mayor, pues lo normal en los poderes mutantes es que se manifiesten en la pubertad. Así ocurrió y, cuando los poderes de Jean volvieron a surgir, esta vez también con telequinesis, Xavier la reclutó para su escuela y su equipo de superhéroes mutantes.

La Patrulla-X original se enfrentó a mutantes malvados como Magneto y su Hermandad o Unus el Intocable, además de a otras amenazas como los primeros Centinelas. Durante aquellos primeros años del grupo, Jean y Scott Summers, conocido como Cíclope, se enamoraron. Al principio, no se atrevían a confesarlo, pero poco a poco fueron comenzando una relación.

El grupo se retiró durante un tiempo antes de reunirse para detener la amenaza de la isla de Krakoa. Sin embargo, todos sus miembros excepto Cíclope fueron capturados y Xavier reunió una nueva formación internacional que acabaría formando la nueva Patrulla-X. Sucedía esto gracias a Len Wein y Dave Cockrum en Giant-Size X-Men nº 1 (1975). Jean se marchó del equipo pero apareció en algunas de sus aventuras debido a su romance con Cíclope y su gran amistad con Tormenta, una de los nuevos miembros.

Wein abandonó la serie al cabo de un par de números; lo sustituyó su ayudante Chris Claremont, que permanecería en la colección durante quince años. El nuevo guionista tenía planes para Jean, para la que todo cambió durante la saga que ocupó los números 98 a 100 de la serie. Una nueva generación de Centinelas atacó a la Patrulla y raptó a Xavier, Lobezno y Jean. El resto del grupo acudió a rescatarlos al cuartel general de Scott Lang, creador de estos nuevos androides. La misión fue un éxito pero la base de Lang estaba en la Luna y el combate la destruyó. Había que escapar de allí, pero una tormenta solar impediría que el grupo volviera vivo a la Tierra. Jean se ofreció a pilotar la nave y usar su poder telequinético para impedir el paso de la radiación mientras sus amigos se refugiaban en la bodega. Al final se estrellaron en el río Hudson y, de las aguas, surgió una nueva Jean Grey convertida en Fénix.

La primera Fénix

Desde el principio, fue evidente que los poderes de Jean habían aumentado tras el accidente. Sus poderes psíquicos estaban al máximo de su capacidad, y habia adquirido otros de índole cósmica. Gracias al Imperio Shi'Ar, la Patrulla supo que Jean convivía con la Fuerza Fénix, un ser tan antiguo como el propio universo.

Como Fénix, Jean volvió a formar parte de la Patrulla-X, con la que combatió amenazas como Magneto o Proteus. No obstante, el poder que habitaba en Jean era cada vez mayor y, poco a poco, se iba apoderando de ella. Esto no pasó inadvertido para el Club Fuego Infernal y, sobre todo, para Mente Maestra. Éste, miembro del Club y antiguo discípulo de Magneto, utilizó sus poderes mentales para manipular a Jean e intentar convertirla en esclava del Club. Mientras ocurría todo esto, Scott y Jean consumaban por fin su relación.

La corrupción final de Fénix se conoció como "La Saga de Fénix Oscura", que abarcó los números 129 a 137 de la serie. Realizada por John Byrne, la historia mostraba como Mente Maestra ponía a Fénix en contra de sus compañeros para después viajar al espacio y aniquilar un planeta entero. Esto despertó la ira de los Shi'Ar, que, una vez "tranquilizada" Jean, la procesaron por genocidio. En un enfrentamiento entre la Guardia Imperial y la Patrulla-X llevado a cabo en la Zona Azul de la Luna, Fénix acabó sacrificando su vida para no volver a sucumbir a su lado oscuro. La muerte o supervivencia de Jean fue largamente discutida en la editorial, y se decidió a última hora. Los planes iniciales de Claremont eran dejarla catatónica y sin poderes. Este final alternativo se publicó años más tarde en forma de especial.

Desde las cenizas

Parece ser que John Byrne nunca estuvo de acuerdo con la muerte de Jean, así que a finales de 1985 urdió un plan para recuperarla. Contó con el apoyo de su colega Roger Stern y de la editorial. Se estaba preparando un spin-off de X-Men con la Patrulla original como protagonista, y había que recuperar a Jean de algún modo. En Avengers nº 263, Roger Stern y John Buscema mostraban como los Vengadores encontraban en el fondo de la Bahía Hudson un capullo de contenido desconocido que irradiaba una poderosa fuerza telequinética. El misterio se resolvió en Fantastic Four nº 286, donde John Byrne mostró el contenido de la vaina: el cuerpo de Jean Grey en animación suspendida. Con una grave amnesia, la joven volvía de entre los muertos, sin telepatía y sin Fuerza Fénix.

El regreso de Jean no era fácil de explicar. "La Saga de Fénix Oscura" ya se consideraba un clásico y contradecirla despertaría la ira de los aficionados. Byrne se sacó de la manga que la Fénix que murió en la Luna no era realmente Jean. Durante la tormenta solar de la que hemos hablado, la Fuerza Fénix acudió a una llamada de socorro de una moribunda Jean Grey. El ente puso el cuerpo de la chica en animación suspendida y suplantó su personalidad y sus recuerdos. Claremont profundizó en este episodio en un complemento de Classic X-Men dibujado por John Bolton.

Así pues, Jean había vuelto y, en X-Factor nº 1, se reunió con sus antiguos compañeros, incluyendo a Cíclope. Sin embargo, las cosas habían cambiado mucho desde su desaparición. Scott había conocido a Madelyne Pryor, una joven idéntica a Jean físicamente, con la que se había casado y había tenido un hijo llamado Nate. Ambos vivían tranquilos en Canadá hasta que al Ángel llamó a Scott para comunicarle la resurrección de Jean. La tensión entre ésta y su antiguo amor fue uno de los subargumentos recurrentes de Factor-X, sobre todo cuando el matrimonio Simonson se hizo cargo de la colección. Dicha tensión se solucionó cuando la antigua pareja volvió a declararse. Pero en aquella nueva historia, Jean era "la otra", porque Scott seguía casado.

Terriblemente despechada, Maddelyne se había exiliado a Australia con la Patrulla-X. Se suponía que el grupo había muerto, pero seguían trabajando de forma clandestina. Poco a poco, Claremont nos dejaba caer que Maddy era más de lo que parecía, pues a veces manifestaba poderes que no se le atribuían. Todo culminó en la macrosaga "Inferno", donde Scott y Jean hicieron frenta a una Maddy enloquecida y manipulada por los demonios del Limbo. Fue entonces cuando se descubrió que era un clon de Jean creado por Mister Siniestro, al que la Fuerza Fénix había acudido tras los incidentes de la Luna. Maddy murió al final de la saga y Scott y Jean pudieron comenzar una nueva vida con el pequeño Nate.

La Fuerza Fénix no había recurrido sólo a Maddy. También se encontraba en el cuerpo de Rachel Summers, la hija de Scott y Jean en un futuro alternativo. Es esta Rachel la que tendría gran importancia en el futuro de la pareja y en el del joven Nate.

Los embrollos temporales

En X-Factor nº 68, a Whilce Portaccio y a Jim Lee se les ocurrió la infeliz idea de enviar a Nate al futuro para salvarle de una grave enfermedad que le había contagiado Apocalipsis, el gran enemigo del grupo. Ante el dolor de Scott y Jean, una Askani se llevaba al niño, pero no sería la última vez que lo vieran. La relación de Jean y Nate la hizo recuperar su telepatía. Ambos regresaron a la Patrulla X y, por fin, se casaron. Durante su luna de miel viajarían al futuro justo después de la llegada de Nate. Así, criaron al niño sin desvelar su verdadera identidad. Ese niño no era otro que el futuro Cable, un justiciero mutante llegado del futuro cuya identidad aún no se había desvelado.

Tras su periplo temporal, Jean recuperó el nombre de Fénix. Tras "La Era de Apocalipsis", conoció a X-Man, otro hijo suyo de dicha realidad alternativa. Tanto ella como Scott siguieron en la Patrulla X e hicieron frente a amenazas como la de Onslaught. Tras la saga "Operación Tolerancia Cero" (que Panini recopilará a partir de junio), Scott resultaba gravemente herido y la pareja se retiró a Canadá.

Durante su retiro, Jean descubrió que sus poderes aumentaban y, para estupor de Scott, se volvió a vestir el traje de Fénix. Esto era una subtrama que los guionistas Steve Seagle y Joe Kelly urdieron para devolver a la antigua Fénix, pero la editorial lo impidió y todo quedó en una saga bastante cutre. Ambos regresaron a la Patrulla para hacer frente a Apocalipsis y su nuevo jinete Muerte, que no era otro que Lobezno. Durante la saga "Los Doce", Scott fundió su cuerpo con el mencionado villano y desapareció.

Tiempo de cambios

Poco después de la desaparición de Scott, los mutantes de la Tierra se quedaron sin poderes por culpa del Alto Evolucionador. Al recuperarlos, Jean perdió su telequinesis y sólo contó con la telepatía durante un tiempo en el que actuaba con la Patrulla X sin Cíclope. Recuperó esa habilidad en la miniserie X-Men Forever de Fabian Nicieza y Kevin Maguire, tras la cual se embarcó en la búsqueda de Scott.

Finalmente, su marido regresó, pero había cambiado mucho. Cuando Emma Frost se unió a la rama de la Patrulla que trabajaba en la Escuela de Xavier, Scott se sintió atraído por su antigua enemiga. Jean sospechaba algo, y pronto los pilló in flagranti. Todo esto entraba dentro de los planes de Grant Morrison, al que Marvel estaba consintiendo alterar el estático status quo de los mutantes. Poco a poco, fue aceptando que había perdido a Scott por Emma y descubrió que estaba volviendo a recibir en su cuerpo la Fuerza Fénix. Jean murió cerca del Sol mientras sus compañeros debían detener en la Tierra la amenaza de un Magneto más poderoso que nunca.

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