6.11.05

LECCIONES DE HISTORIA (III)

EL PORQUÉ DE CRISIS EN TIERRAS INFINITAS
"El concepto básico que me planteé desde el principio fue que después de Crisis nadie del nuevo Universo (salvo algunas excepciones) recordara lo sucedido. Me horrorizaba la idea de que durante los próximos veinte años todo el mundo aún discutiera sobre la diferencia entre el antiguo Multiverso y el actual."
Marv Wolfman
Hace un par de semanas os hablaba de cómo nació el Multiverso y el nuevo Universo DC, de cuál fue el origen de ambos e intenté indagar un poquito en algunos cambios que se produjeron en la continuidad de los personajes. Obviamente, esta materia es tan amplia que hubiese sido imposible condensarla en un artículo, así que en próximas entregas seguiré tocando el tema. Mientras tanto, hoy me gustaría hablaros de cómo nació Crisis en Tierras Infinitas. No todo el acontecimiento, sino el propio cómic en sí. Son muchas las dudas que suele haber respecto a ciertas cosas en torno las Crisis, y es común ver a personas hablando de ello pero sin saber realmente el cómo y el porqué pasó lo que pasó.
Aunque hoy en día estamos acostumbrados a los crossovers y grandes eventos, a principios de los ochenta una idea como esta era una auténtica locura. La idea vino de Marv Wolfman, que harto de las incoherencias que se producían en el Multiverso pensó que la única solución era acabar con todo y volver a empezar. Es famosa aquella carta de un lector comentándole que había cosas de la continuidad de DC que no acababan de tener sentido y la respuesta de Wolfman, dejando entrever que tenía en mente hacer algo para solucionar todo este embrollo. Pero todas esas incoherencias en el viejo Multiverso se podían haber solucionado como hoy se solucionan muchas otras cosas y, sobre todo, con la editorial dejando bien claro a sus autores qué enfoque debían de tener sus cómics. Si la Atlántida que aparecía en las páginas de Superman y la de Aquaman no eran la misma, era tan fácil como inventar alguna explicación, aunque fuese absurda. Y si algunos elementos como como Krypto o Beppo el Supermono parecían desfasados, era tan simple como matarlos. Del viejo Multiverso se puede extraer decenas y decenas de historias fantásticas como los encuentros entre la JLA y la JSA que son una auténtica delicia. Wolfman, sin embargo, decidió que lo mejor que se podía hacer era borrar todo aquello y resetear la continuidad. Pero claro, su idea inicial era que el Universo DC comenzara totalmente de cero, así que, a pesar de los pesares, de todo aquello podía salir algo bueno. "Las dos cosas más importantes que quería hacer -dice Wolfman- y para las que DC no me dio permiso fueron, en primer lugar, que al final de la Crisis se suponía que nadie podría recordar nada acerca de las mismas. El mundo habría renacido de un modo totalmente nuevo. Por desgracia, justo antes de eso había dicho que los héroes sí que tendrían que recordarlo, lo que fue un error enorme." Es más, la intención del guionista era que todas las series de la editorial reiniciaran su numeración. Hubiese sido una forma de dejar bien claro que todo volvía a empezar de cero, pero DC se negó a ello: "Nunca se había hecho nada parecido y los editores no sabían muy bien qué hacer. Y tampoco les interesaba hacerlo porque supondría, posiblemente, modificar sus colecciones. De todos modos tengo que decir que desde entonces los editores se han dado cuenta de lo importantes que pueden ser estas grandes sagas." Obviamente, borrar toda la vieja continuidad hubiese supuesto cerrar muchas series que, en ese nuevo Universo DC, no habría tenido sentido. Es curioso que el guionista estuviese dispuesto a hacer algo así cuando eso eliminaría a los Nuevos Titanes, el cómic en el que tanto había trabajado en los últimos años y con tanto éxito. Finalmente se optó por una solución que agradara a ambas partes, al escritor y al guionista. Esa solución fue, como expliqué la semana pasada, que ciertas cosas previas la Crisis se recordaran y otras que no. En el tema de la renumeración de las series, lo cierto es que en algunas sí se hizo, como Superman o Wonder Woman, o incluso al poco tiempo con la JLA o Flash, pero lo que está claro es que el deseo de Wolfman de un nuevo y coherente Universo DC no se cumplió como él tenía en mente. De hecho, es conocido el caso de la muerte de Flash, algo que él no deseaba ni mucho menos y que se produjo por obligación editorial. Respecto a la muerte de Supergirl y su recuperación en el nuevo Universo DC el autor dice "Yo mismo había planeado crear una nueva Supergirl. No se trataba de deshacerse de todo ese material, sino de recuperarlo sin los errores que se habían estado cometiendo en los últimos cincuenta a veinte años".
Queda claro que la intención de Wolfman no era otra que la de obtener un nuevo y fulgurante universo que estuviese atado al pasado, sólo al presente y a un futuro presumiblemente bueno. De todo esto quedan algunas cosas, aunque otras muchas se perdieron en el camino. Y es que aunque uno tenga buenas intenciones no todo llega siempre a buen puerto.